Tu próximo mejor mapa mental: Consejos para crear y gestionar sesiones de mapas mentales
El trabajo en equipo es un aspecto esencial de cualquier organización. A menudo las empresas, desde las de pequeña escala hasta las de gran escala, se enfrentan a situaciones y problemas complejos que pueden beneficiarse del esfuerzo combinado de sus diversos equipos multifuncionales y expertos. Pero conseguir que estos diferentes orígenes trabajen juntos puede ser un asunto complicado en sí mismo.
Los puntos de vista de diferentes tipos pueden enturbiar fácilmente el agua en cuanto a lo que estás tratando de lograr. Con tantas voces en la sala, tu objetivo como gestor y/o jefe de proyecto eficaz es garantizar que cada punto de vista se escuche y se evalúe frente al resto de forma justa y equitativa.
Como muchas cosas en la empresa, hay muchas formas eficaces de generar y cotejar fácilmente ideas entre tu equipo para llegar a una idea concreta después de la sesión. Uno de estos métodos, el "mapa mental", es probablemente algo que has experimentado utilizando en uno o dos workshops. Pero ¿sabías que esa herramienta de forma libre puede utilizarse con mayor eficiencia y eficacia con unas sencillas estrategias?
En este artículo, veremos algunos consejos que pueden ayudarte a sacar el máximo partido a tu próxima sesión de mapas mentales, para que puedas aprovechar mejor la funcionalidad de esta herramienta.
¿Qué es un mapa mental?
Antes de adelantarnos, vamos a sentar las bases de la comprensión del mapa mental al que nos referimos. Dado que la ejecución de un mapa mental puede variar mucho de un usuario a otro, puede ser beneficioso empezar con una definición que nos ayude a ponernos de acuerdo.
Según el Diccionario de Cambridge, un mapa mental es simplemente un "tipo de diagrama (= plan simple) con líneas y círculos para organizar la información de modo que sea más fácil de usar o recordar". Dicho de otro modo, un mapa mental utiliza las ideas centrales o los temas para generar mejor las ideas relacionadas, como ejercicio para identificar mejor o generar nuevas ideas en relación con un tema concreto.
Puede parecer un poco abstracto en su ejecución, ya que esencialmente te centras en un método en gran medida subjetivo de referenciar ideas en relación con un tema específico, pero la práctica en sí misma ha sido extremadamente beneficiosa para los equipos que buscan obtener una comprensión más profunda de un proyecto, iniciativa o asunto en el que están trabajando.
Beneficios de los mapas mentales
Los mapas mentales van más allá de la mera resolución de problemas abstractos como beneficio clave para su uso entre equipos e individuos. Ryan Ayers, escritor de Business.com, comparte tres beneficios principales que los mapas mentales pueden tener para la forma de gestionar tu trabajo.
En primer lugar, los ejercicios de mapas mentales se centran en nuestra capacidad de aprendizaje, lo que puede ayudarnos a retener nuevos conocimientos al conectarlos con nuestra base de conocimientos existente. La práctica de crear conexiones entre las ideas ayuda a formar vínculos importantes en nuestro cerebro que contribuyen a la retención de la información. A ello contribuye en parte el aspecto visual del propio diagrama del mapa mental, en el que nuestro cerebro acaba absorbiendo la información no sólo de forma referencial, sino también de forma visualmente organizada.
En segundo lugar, los ejercicios de mapas mentales ayudan a reforzar la productividad de los usuarios. Ayers continúa citando una encuesta de investigación en la que los encuestados respondieron que su productividad había mejorado en un margen de entre el 20 y el 30%. Esto tiene beneficios muy reales para el trabajador medio, ya que aproximadamente el 70% de los encuestados en el mismo estudio afirmaron que el proceso les ahorra unas siete horas de trabajo y/o aprendizaje esa semana.
Por último, los mapas mentales pueden ayudarte a comunicar mejor tus ideas y presentarlas de forma profesional. A menudo las cuestiones organizativas son complejas y tienen varias capas, por lo que utilizar las técnicas de los mapas mentales puede ayudarte a aclarar cómo se relacionan las ideas entre sí de una forma dinámica y visualmente atractiva. Desde los gestores de proyectos hasta los responsables de marketing, es probable que te beneficies de la capacidad de esta herramienta para presentar las ideas con mayor claridad, así como para desarrollar diagramas que muestren cómo ciertos conceptos se vinculan a las ejecuciones estratégicas.
Consejos para mejorar tus mapas mentales
La consecución de los numerosos beneficios de las técnicas de mapas mentales depende únicamente de la capacidad del usuario para aprovechar el ejercicio de forma eficaz y eficiente. Debido al método intrínsecamente abstracto de desarrollar mapas mentales, puede ser fácil para el usuario medio dejar que estas sesiones se desvíen con pensamientos desorganizados y conceptos no relevantes.
Siguiendo con el objetivo de sacar el máximo provecho a los mapas mentales, a continuación te ofrecemos algunos consejos útiles para mejorar tus sesiones de mapas mentales, de modo que puedas dirigir mejor un workshop en tu próxima reunión.
Limita tus ideas principales
Lo primero en lo que deberás centrarte como parte de tu ejercicio de mapa mental es asegurarte de limitar el número de ideas principales que forman parte de tu tema central. Lo ideal es que mantengas la idea central centrada en una sola palabra, frase u oración que pueda generar mejor las indicaciones de tu equipo. De este modo, podrás centrarte mejor en los tipos de palabras y conceptos relacionados que puedan surgir a lo largo del debate.
Sin embargo, no es inusual que los mapas mentales utilicen más de una idea principal, ya que también pueden utilizarse en la comparación de productos y en las evaluaciones alternativas. En estos casos, practica la limitación de los conceptos principales de la propuesta a unas 2 o 3 ideas principales en las que puedas hacer que tu equipo se centre. Encierra estas ideas como tema principal de debate y deja que las palabras empiecen a fluir a partir de ahí.
Más aún, no dudes en utilizar las diferentes opciones multimedia que tenemos a nuestra disposición en los espacios de colaboración actuales, mucho más avanzados tecnológicamente. En lugar de la idea (o ideas) principal representada como una palabra o frase, puedes utilizar una foto o incluso un audio y crear tu mapa mental en torno a estos temas centrales.
Organiza las subideas en categorías
Una vez que hayas fijado el tema principal de la discusión con tu mapa mental, es importante que mantengas el mismo enfoque sobre cómo empezar a generar ideas en relación con ese tema central. Los mapas mentales generan muchas ideas al principio del ejercicio, así que asegúrate de anotar todas las que puedas de las diferentes perspectivas que probablemente surjan de tu equipo.
Debido a la posibilidad de que haya muchas ideas similares en tu mapa mental, puede ser beneficioso empezar a desarrollar categorías para las ideas a medida que avanzas en el ejercicio. Esto significa ser un participante activo mediante el reconocimiento de patrones a lo largo del proceso. Tendrás que permanecer atento a cualquier idea que pueda estar mejor representada como parte de un grupo más amplio de ideas, lo que puede ayudar a dirigir a tu equipo hacia una comprensión colectiva que puedan compartir.
A la inversa, también puede ser útil empezar a reconocer ideas contrastadas en el mismo mapa mental para crear mejores distinciones en la forma en que tu grupo puede llegar a entender ciertos conceptos. Este tipo de respuestas pueden surgir de temas especialmente conflictivos, como la dirección que debe tomar el lanzamiento de un producto, y pueden ayudar a obtener una visión global de algunas de las ideas contrapuestas que pueda tener tu equipo respecto al proyecto.
Profundiza con el Interrogatorio de Colaboración
Algunos temas centrales pueden tener más ideas que debatir que otros. En el caso de estos últimos conceptos, puede ser un reto hacer rodar la pelota, ya que los temas relacionados acaban desvaneciéndose tras unas pocas respuestas. Una buena forma de exponer los conceptos y generar ideas mucho más ricas es utilizar una técnica conocida como "Interrogatorio de Colaboración".
Michael Pressley, psicólogo educativo, desarrolló esta técnica de aprendizaje que permitía a los alumnos comprender mejor temas concretos. Se trataba esencialmente de una "intervención interrogativa" que utiliza la simple pregunta de "por qué" con respecto a cualquier afirmación realizada en relación con la comprensión de un tema concreto. Aunque Pressley utilizó esta táctica en un esfuerzo por mejorar la retención de la memoria con la forma en que los alumnos retenían la información, también puede utilizarse en tus técnicas de mapas mentales para profundizar en conceptos específicos para un mejor desarrollo de las ideas.
La teoría que explica por qué la interrogación elaborativa funciona en diversos casos es que ayuda a activar esa parte de nuestro proceso de pensamiento en relación con cualquier conocimiento previo que podamos tener sobre ese tema. Por ejemplo, si preguntas "por qué"un miembro de tu equipo ha decidido asociar la palabra "rápido" con un coche deportivo, podrás profundizar en los detalles técnicos del coche, la reputación del producto, su percepción general, etc. Es una técnica sencilla pero útil que ayuda a impulsar un pensamiento mucho más crítico en relación con cualquier tema concreto y puede ayudarte a obtener más respuestas para tu mapa mental.
Fomentar el pensamiento lateral
En relación con la importancia de impulsar un mejor pensamiento crítico en relación con un tema central determinado, el "pensamiento lateral" es otro concepto que merece la pena explorar con tu equipo mientras sigues obteniendo información de ellos. El término en sí significa esencialmente "pensar fuera de la caja" y pretende ilustrar el tipo de pensamiento que está relacionado con el tema, pero que viene en una dirección no asociada normalmente con él.
El pensamiento lateral en sí mismo se ha convertido en un componente clave de los equipos innovadores en el lugar de trabajo, hasta el punto de que el equipo editorial de Indeed publicó un artículo en el que se describen varios pasos clave para mejorar las capacidades de pensamiento lateral. Acuñado originalmente por el médico maltés Edward de Bono, el pensamiento lateral puede ayudar a mejorar el propio pensamiento para abordar cuestiones más complejas y escenarios no tradicionales.
En el contexto del mapa mental, puede ser extremadamente beneficioso empezar a fomentar el sentido del pensamiento lateral para obtener los mejores tipos de ideas que conduzcan a una visión mucho más innovadora que quizá no hayas pensado inicialmente. Ser consciente de tu comprensión del tema y de tus procesos en relación con él puede ser útil para liberarte de algunos prejuicios que puedas tener, mientras que presentar escenarios y alternativas puede ayudar a impulsar el pensamiento más allá de la comprensión estándar de cualquier situación en la que estés trabajando actualmente.
Utilizar los "aparcamientos"
Es probable que no todas las ideas presentadas en un mapa mental sean un jonrón. De hecho, es probable que te encuentres con un montón de ideas propuestas que simplemente no encajan bien en el marco exacto que buscas (especialmente cuando empieces a utilizar categorías en tus mapas mentales). Pero aunque estas ideas no funcionen en el estado actual del mapa mental, no significa que no tengan ninguna utilidad en una iteración futura o en un mapa mental relacionado más adelante.
Por ello, tal vez quieras explorar el uso de "aparcamientos" en tus mapas mentales, que es una forma útil de organizar las ideas no relacionadas en un espacio real de tu documento para poder volver a consultarlas más adelante. Esto tiene dos claros beneficios en la forma de colaborar con tu equipo. En primer lugar, estás creando un recurso de ideas que quizá no sean relevantes ahora, pero que pueden ayudar a desarrollar otras ideas más adelante, a medida que avanzas en proyectos relacionados. En segundo lugar, los aparcamientos te ayudan a que tu equipo se sienta escuchado en el proceso general del mapa mental, lo que es importante en un ejercicio que exige un compromiso constante de cada miembro para obtener el mejor tipo de resultado colaborativo.
Dirigir tu próximo mapa mental Session
Los consejos presentados anteriormente pueden aplicarse a casi cualquier sesión de mapas mentales que tengas en el futuro y son lo suficientemente flexibles como para utilizarlos de la forma que consideres oportuna. Es muy probable que no todos los consejos sean útiles en todos los escenarios, ya que cada situación a la que te enfrentes al utilizar un mapa mental será muy sensible al contexto específico. Aun así, puede ser útil tener un conjunto de tácticas de partida para que tu sesión de mapas mentales sea más eficiente y productiva en el futuro.