¿Qué es exactamente la transformación digital?

Marc Benioff, el Presidente y CO-CEO de Salesforce dijo: "Toda transformación digital va a empezar y terminar con el cliente, y puedo verlo en la mente de cada CEO con el que hablo."

Pero, ¿qué significa esto? 

Antes de empezar, comprenda que todas las empresas se encuentran en distintas fases de transformación digital. Algunas necesitan implementarla, pero otras nacieron basándose en estos principios. Por lo tanto, dos organizaciones diferentes no tendrán el mismo enfoque ni las mismas metodologías para abordar la transformación digital, dependiendo de dónde se encuentren en esta reflexión.

Ahora que hemos sacado eso, veamos qué es exactamente la transformación digital para una empresa. 

¿Qué es la transformación digital para una empresa?

La transformación digital (TD) se refiere a la utilización de tecnologías digitales para revolucionar los procedimientos y servicios empresariales convencionales y no digitales. 

En términos más sencillos, se trata de transformar progresivamente los procesos de una empresa, ya sea adaptando los existentes o desarrollando otros innovadores para dos fines: 

1. Evolucionar con la dinámica del mercado; 
2. Evolucionar con las cambiantes demandas de los clientes.

La estrategia empresarial de transformación parte de algo tan pequeño como un cambio en las operaciones diarias y puede llegar tan lejos como todo un cambio cultural dentro de una empresa. 

Pero antes de seguir adelante, hablemos de algunas cosas que pueden parecer complicadas.

¿Cuál es la diferencia entre transformación digital y digitalización?

Por ejemplo, si decides pasar de los documentos en papel y otros documentos ofimáticos de Word guardados en archivos de oficina locales a los documentos en la nube, es un acto de digitalización. Es decir, estás digitalizando la forma de operar de tu empresa. Pero esto no significa necesariamente que estés transformando tu empresa, ¿verdad?

La transformación digital de una empresa no consiste únicamente en adoptar el lado digital de la vida. Se trata de cambiar la cultura de la empresa para adaptarla a la demanda del mercado y a una dinámica vertiginosa. 

El proceso implica una transformación de su enfoque operativo y de la forma en que proporciona valor a sus clientes. Además, requiere un cambio en la cultura organizativa, que exige una voluntad permanente de cuestionar las normas establecidas, experimentar y aceptar el fracaso como parte del proceso de aprendizaje.

Ahora, a partir de la cita anterior de Marc Benioff, ¿entiendes por qué los CEO tienen que preocuparse tanto por las necesidades del cliente y las exigencias del mercado para "transformarse digitalmente"?

¿Quién introdujo por primera vez el concepto de transformación digital?

Aunque Steve Jobs es el padre de la revolución digital, la transformación digital existe desde hace mucho más tiempo: estamos hablando de finales de la década de 1950, cuando se inventaron el transistor semiconductor y el microchip debido a un cambio en las demandas del mercado y de los clientes. Este cambio hizo que cierto hombre rompiera con la norma y empujara al mundo desde el método analógico de computación a la transformación digital completa. 

Este hombre se llama Dr. Claude Shannon, el padre de la transformación digital. Pero incluso antes de finales de los años 50, ya hablaba del concepto en su artículo de 1948, A Mathematical Theory of Communication (Una teoría matemática de la comunicación). Sin embargo, aunque el Dr. Shannon introdujo el concepto, no fue él quien lo aplicó. 

¿Dónde se aplicó primero la transformación digital?

Tuvo que pasar toda una década desde la introducción del concepto para que le siguiera la aplicación. Si bien hubo una sutil introducción de ARPANET, precursora de la internet moderna, la Ley de Moore fue más reconocida como una aplicación de la transformación digital empresarial. 

Bautizada con el nombre de Gordon Moore, fundador de los semiconductores y Consejero Delegado de Intel en aquella época, la ley señalaba inicialmente la tendencia de la potencia de cálculo a duplicarse aproximadamente cada año. Tras este periodo, llegaron los videojuegos arcade, los ordenadores domésticos y una mayor necesidad de introducir datos.  

1980, también se introdujo la World Wide Web, y la transformación empresarial dio un salto de gigante. Pero no fue un concepto plenamente desarrollado hasta que se introdujo la red 2G a finales de los 90 y los teléfonos móviles se vendieron comercialmente a todo el mundo. Así empezó la digitalización (y la digitalización dio origen a la transformación digital). 

¿Cuándo empezó a ganar terreno en empresas de todos los ámbitos?

A principios de la década de 2000, más de la mitad de la población estadounidense tenía un ordenador personal y acceso a Internet. Ya no se trataba del artículo del Dr. Shannon ni de la ley de Moore. La revolución se había extendido hasta los bolsillos de la gente. Pero aún así, no fue hasta 2010 cuando la digitalización de los sistemas manuales y analógicos estaba casi concluida, y la siguiente trayectoria (la Transformación Digital) podía comenzar en todo su esplendor. 

Con una sólida trayectoria de sistemas digitales ya en marcha, los proyectos de transformación digital no tardaron en mostrar su éxito y pasar de una infraestructura a otra. Sectores como los medios de comunicación, los servicios financieros e incluso las empresas de telecomunicaciones siguieron adoptando el enfoque estratégico de la transformación digital para el éxito de la empresa y el valor para el cliente. Los presupuestos digitales aumentaron y las soluciones de software subieron como la espuma. 

Pero incluso con todos estos detalles, fechas y estadísticas, casi no habría ningún cambio en su negocio si no sabe cómo funciona el proceso. 

¿Cómo funciona el proceso de transformación digital?

Recordemos que el DT es el esfuerzo mediante el cual una empresa utiliza las tendencias del entorno y las demandas de los clientes para impulsar el negocio hacia adelante o en una nueva dirección.

Recuerde que no todas las empresas requieren transformación digital. Algunas empresas nacieron basadas en principios empresariales de transformación. He aquí una visión general de cómo funciona el proceso de transformación digital en función de las necesidades de su empresa.

Comience por evaluar la tecnología de su empresa

La evaluación es necesaria para conocer el tipo de transformación digital que necesitará (si es que la necesita). Identifique las áreas que necesitan mejoras, comprenda los retos y acceda al estado actual de las capacidades, los procesos y la tecnología de su empresa. 

Desarrollar una visión clara

Define qué es para ti el éxito y desarrolla una visión alineada con ese objetivo. También puedes dedicar tiempo a establecer objetivos específicos e indicadores clave de rendimiento (KPI) para el seguimiento del éxito. 

Identifique las tecnologías que se ajustan a sus objetivos de DT

Diferentes tecnologías apoyan los procesos de transformación digital. Algunas incluyen herramientas de IA, IoT, análisis de datos, computación en la nube, colaboración asíncronay muchas más. Identifique cuál de estas herramientas se ajusta a sus objetivos. 

Sin embargo, la colaboración asíncrona ha sido uno de los principales métodos de trabajo adoptados por los directivos y sus equipos desde la pandemia de 2020. Por lo tanto, si aún no has adoptado esta metodología, no esperes para impulsar tu proceso de transformación digital. 

Desarrollar una estrategia práctica

Este es el trabajo del Director de Información (CIO), pero todos los ejecutivos deben ser conscientes de este paso en cualquier caso. Después de que todos hayan decidido qué herramientas se necesitan y el objetivo que se quiere alcanzar, el siguiente paso es desarrollar una estrategia que incluya la recopilación, el almacenamiento, el análisis y la seguridad de los datos. 

Para avanzar en la dirección correcta, utilice los datos para obtener información, tomar decisiones informadas y personalizar las experiencias de los clientes.

Optimice lo que tiene

Aquí, todo lo que tiene que hacer es revisar y racionalizar los procesos existentes para eliminar ineficiencias y cuellos de botella. Además, reimagine los flujos de trabajo para aprovechar las herramientas digitales y la automatización.

Forme a sus empleados

Su empresa no es sólo cosa suya. Sus empleados y trabajadores también deben participar en el proceso. Dicho esto, imparta formación y oportunidades de actualización para garantizar que los empleados dominan las nuevas herramientas y tecnologías digitales. 

Además, pida a sus empleados que se centren en mejorar la experiencia del cliente aprovechando los canales digitales y recabando sus opiniones. Estas opiniones se transmitirán al CIO, que las utilizará para perfeccionar productos y servicios.

Los últimos retoques

El resto de los pasos son igual de importantes, pero pueden agruparse para formar las últimas cosas que usted y sus empleados deben tener en cuenta. Entre ellas están: 

1. Implantación de sólidas medidas de ciberseguridad para proteger sus datos y sistemas. 
2. Probar nuevas tecnologías que nunca ha utilizado en pequeños proyectos piloto. 
3. Encargarse del seguimiento de cada proceso, progreso y ajuste. 
4. Obtener informes frecuentes para poder medir el éxito e iterar los siguientes pasos. Acuérdate también de hacer un seguimiento de los KPI. 
5. Colaborar con socios externos, otros ejecutivos y los principales líderes del sector para mantenerse a la vanguardia de la innovación digital.
6. Mantener un bucle de retroalimentación con sus empleados, partes interesadas y otros directivos de su empresa para incorporar sus aportaciones a las mejoras continuas.

Por todo lo anterior, ya puede ver que la transformación digital es un largo viaje que requiere compromiso y voluntad de adaptarse a los cambios que plantean las exigencias del mercado y sus clientes. Eso significa también que es un proceso complejo en el que embarcarse. Entonces, ¿por qué no puede saltarse este paso de ninguna manera si quiere impulsar su empresa hoy? 

¿En qué beneficia a las empresas que deciden adoptarlo?

Lo cierto es que todas las empresas necesitan transformación digital. No solo las grandes, sino también las startups y las pymes. Pero la pregunta sigue siendo: ¿qué ganan con ello?

Para empezar, embarcarse en estrategias de transformación digital permite a las empresas comprender mejor a sus clientes y comprometerse con ellos, ya que, sin estos procesos, podría resultar más difícil entender las experiencias personalizadas del mercado, la asistencia en línea y los conocimientos basados en datos, lo que, por cierto, aumenta significativamente la satisfacción del cliente.

Además, adoptar las tendencias digitales le ayuda a adelantarse a la competencia. Le permite innovar y adaptarse a las cambiantes condiciones del mercado y, lo que es aún más importante, le permite ampliar su alcance más allá de las fronteras geográficas. 

Así pues, la transformación digital es más que una tendencia. Es una necesidad si desea seguir siendo relevante. Es potenciadora y eficiente, independientemente del tamaño o la estructura de su empresa. Así pues, si desea empezar a utilizar las herramientas digitales más recientes, consulte la plataforma visualKlaxoon e inicie el proceso de transformación digital de su empresa.